«Los ritos del agua de Eva García Sáenz de Urturi, es una segunda novela tan adictiva como la primera que continua la saga iniciada con El silencio de la ciudad blanca. En ella se vuelven a investigar una serie de asesinatos con referencias mitológicas, mientras los mismo personajes profundizan en sus relaciones al tiempo que desenredan una historia, que de nuevo les vuelve a tocar muy de cerca. Me ha gustado. Entretenida y bien llevada»

Los ritos del agua Eva García Saenz de Urturi

Segunda parte de la trilogía

Esta novela es como ya he adelantado, la segunda novela de la trilogía que la escritora ha ambientado en la ciudad de Vitoria, que debido al enorme éxito de la primera parte, «El silencio de la ciudad blanca» ya están llevando al cine.

La segunda parte continúa donde lo dejó la primera, y si bien se puede leer de forma independiente, hace muchas referencias a la novela anterior por lo que yo recomiendo leerlas en orden. Se mantienen los personajes, Unai, el Kraken, un policía famoso en la zona, por sus trabajos como perfilador de asesinos en serie, su compañera la detective Estibalíz y Alba la subcomisaria de policía con la que mantiene una relación que se inicia en la anterior novela.

En este nuevo caso, el Kraken aun maltrecho del caso anterior tiene que investigar en su propio pasado y rescatar recuerdos que mantenía ocultos por lo dolorosos que eran. Su primera novia aparece asesinada, colgada de un árbol con la cabeza sumergida en agua. Para descubrir a su asesino removerá emociones y se pondrá nuevamente en el punto de mira de la pequeña ciudad.

Las raíces celtas como inspiración

El libro mantiene las mismas claves de la novela anterior. La escritora se sirve de los interesantes mitos celtas y sus escenarios para situar los puntos claves de la acción. De hecho cada capítulo tiene el nombre de un lugar de la zona con lo que hacemos un pequeño recorrido por los mitos celtas tanto en  Euskadi como por Cantabria, que en esta ocasión tiene un papel también destacado en la trama. El hecho de inspirarse en la nutrida tradición celta en sus obras las dota de un aire mágico y misterioso muy acertado, que le da mas cuerpo a la narración.

Las herencias traumáticas

Los traumas psicológicos y de la infancia vuelven a ser motores de la trama, el peso de conflictos interiores y familiares se vuelve a reflejar. La importancia de las relaciones partenofiliales  en la formación del individuo quedan patentes en todos los personajes de la novela. Las carencias afectivas de padres dominantes, ausentes o desconocidos son uno de los hilos conductores y determinantes.

Misterio e intriga

El libro te engancha con rapidez y te mantiene en vilo deseando saber qué sucederá finalmente, lo cual es en mi opinión, la clave del éxito de toda novela de misterio. Juega con la sorpresa del lector al tiempo que con su conocimiento previo de muchos detalles, y esto hace que anticipemos momentos y nos sorprendamos con otros. Este punto ya lo dijo Hitchcock, es la clave para una buena historia de intriga.

Estilísticamente correcto

La novela está bien escrita, pero no destaca precisamente por elloel estilo es más bien transparente. Los díálogos son correctos y el desarrollo de los personajes también. Equilibrado entre descripciones, reflexiones y trama lo cual es algo muy a su favor. Cumple con lo que se espera del género pero tampoco es que literariamente vaya a perdurar como una joya.

Opinión personal

Me ha gustado, la he leído con interés y ganas pero reconozco que me ha sorprendido menos que la primera novela de la serie. En alguna ocasión me ha resultado más predecible, pero lo disculpo, porque yo tengo bastante intuición y suelo descubrir quién es el asesino en muchas de mis lecturas de novela negra. Aun así la voy a recomendar porque creo que es una estupenda lectura de cara al verano, que no va a defraudar a los que hayan leído la primera parte.

Tercera parte en el horno

Por lo que he leído la escritora ya está planteando la tercera parte de la trilogía, que por supuesto también leeré con curiosidad. Me gusta saber que se van consagrando nuevas escritoras con nuevas ideas en el género de la novela negra. Por otro lado me recuerda mucho por el estilo y la temática a Dolores Redondo con su trilogía de Baztán pero no creo que sea un problema, ya que ambas beben de la mitología y el misterio con personajes bien desarrollados y tramas complejas, con lo que supongo que es inevitable encontrar ciertos paralelismo. De todas formas ambas escritoras me gustan mucho así que encantada de que la novela negra esté tan viva.